
Como bien transmite el saber popular, que es el saber mas sabio que hay, los alimentos que comemos, la forma en que lo hacemos, la cantidad, su distribución a lo largo del día, las técnicas de cocinarlos... repercuten no sólo en nuestra salud sino también en nuestro humor y estado de ánimo.
Me gustaría que a través de las entradas de este blog todos aprendiéramos un poquito (¡al menos! Si fuera mas de un poquito, mejor) sobre nuestra alimentación, nuestras necesidades nutricionales y contribuir con un granito de arena en hacer la vida mas saludable, feliz y placentera.
¡A su salud!